viernes, 13 de febrero de 2009

Orgullo partidista

Fidel Flores P.

Si en la Roma decadente
Calígula emperador
a su caballo hizo cónsul sin pudor,
nada envidia el legislador Payán
al entronizar a su chofer
como su flamante sucesor.

Y el desprecio no será
para tan singular relevista,
dueño de una Hummer ya
como aportación congresista,
es a Payán, previsor anticrisis,
hoy enfundado de comisionista.

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