martes, 27 de abril de 2010

Fantasías y cruces

Gustavo Salazar A

Madre Tierra,
engulles cadáveres
como si de hambre sufrieras,
tus entrañas nutres
indolente en festines
de tantos hijos tuyos,
sin apiadarte de las cuencas
pútridas que ya reniegan
del llanto que al cielo ruega
la furia aplacar.

Se torna escarlata tu faz
de tinto vino
que inmisericorde
te baña y te flagela
con su colosal sed
de violetas y girasoles,
de rezos y café.

Madre Tierra, tu tristeza
de flores y frutas galana,
es cosecha de fantasías
y de cruces,
es risa y es llanto,
es polvo, es lodo,
agua entre los dedos:
es dolor en lo inmenso
de tu voz.

lunes, 26 de abril de 2010

Delirios y quejidos

Gustavo Salazar A

Como badajo
de fofo campanario
es su balanceo
rumbo al trabajo,
con el plomo de todas
las penurias en sus negras
canas siempre entre semana
resignado y cabizbajo
al más allá pareciera va.

Cual patas de elefante
arrastra los pies
y su paso charco de grasa
por su enorme redondez;
acongojado suda la cruda
de nueve a eternas tres
y lo enoja interrumpir
la fiesta por la necesidad
de trabajar para beber.

Sus cachetes derrumba
en un tembleque banquillo,
que cruje y se achica
con mucha razón
ante esa mole
de eructos y tripas,
que en miles de cerveza
con sórdida embriaguez
su mundo pone de cabeza.

Hacia su casa resbala
en ríos de sudores,
la algarabía truena
al arribo de su sala
repleta de güisquis
y tequilas sin falta
de gorrones;
copa tras copa la cisterna
llena y recarga con botanas
y pozole: dinamita
que en el baño no falla.

Echado bocarriba,
su dormitar oscila
entre delirios y quejidos;
sueña ser Bruce Lee
o Slim en submarino;
de esa maravilla brinca
a la danza macabra
entre diablos y duendes
que en sus bigotes
prenden la orgía;
con intermitentes obuses
de su vientre expulsados,
por un instante su infierno
de alcohol es aplacado.

sábado, 24 de abril de 2010

Agua tus manos

Gustavo Salazar A.

Si en tus manos
las mías dejaras,
como el capullo
en estreno de primavera
con sonrisas de luces,
en vientos traviesos libre,
con un estruendo
de radiantes colores,
el ondear de banderas idas,
entre diques y sombras
tu gloria restañaría.

Áridas manos,
manantiales de magia,
de menesterosos de vida
fuente de energía,
bálsamo que alumbra
y alivia los caminos,
como a Lázaro
¡Levántame de la agonía!

Manos de agua
fresca y clara,
escúrreme,
de rostro a pies fluye,
alimenta mis sentidos,
sean fuego,
sean calma;
agua tus manos,
mares de dicha,
océanos de extravío.

viernes, 23 de abril de 2010

Arrebatos

Gustavo Salazar A

De golpe toda su ira
cayó en mis ojos,
eran fuego los suyos,
rabia que nubla
igual que humo
la pradera en estío llora.

Su lengua de embrujo,
lisonjas y Padrenuestros,
en deseo de pesar infinito
y licor mortal se tornó;
esas manos expertas
en adormilar cuerpos,
las carnes desgarran,
inyectan siglos de odio
y el cielo hieren.

Furia son esas lágrimas
que al rozar sus labios arden,
son gotas de sangre de virgen
infernal; sosegadas un instante
en espera de aliento,
en besos y delicias
un cielo su despertar,
y en segundos aviva el tormento.

martes, 20 de abril de 2010

Medusa

Gustavo Salazar A

Patria también mía,
huérfana de padre
y de madre sin pizca,
agoniza en rojo y negro
teñido tu rostro.

Festín de corazones rotos,
muecas de tripas saltarinas,
ojos vacíos, ritual a destajo
en calles y oficinas,
letrinas de lonjas.

Languidece el ogro,
escupe y grita en vano
ante su moderna Medusa,
su otra mano,
que petrifica generosa
con plata o plomo.

Nuestros ojos hielo de llanto,
amor que aprisiona su pesar
y enmudece entre cadáveres
como alfombra de costa a costa
y deambula con un grito apagado
y estalla en el paladar
como patético canto:
“Como México no hay dos”:
imperio de lodo y resplandor.

sábado, 10 de abril de 2010

Ánfora de hambre

Gustavo Salazar A.

Al sabor de ráfagas de sol,
del beso locuaz de la brisa
y mimos de agua fría,
la mente astrosa avivan
en la lucha por los días.

Bellos honores a la vida,
como a las tejedoras
de milagros con las manos,
a los niños y ancianos
esqueletos sin desmayos
por una bagatela en esquina,
y a las aves, los gatos y perros,
sin ofrendar a los que brillan
acumulando kilo a kilo
sin fatiga todo el desprecio,
por el llanto y la sangre rala
de quienes polvo y aire tragan,
ánforas de votos,
votos ajenos a su casa.

lunes, 5 de abril de 2010

Mis Mares

Gustavo Salazar A.
A Cris

Mis mares padecen
insolación infinita,
aguas marchitas
en agobio de sol
estancan su caudal,
en silencio
en trampas de sal
ahogan su vals.

Sin brillo mis mares,
como cuchillos sus sales
avivan el duelo y el corazón
su descoloro maquilla,
sin herida a la vista
la calma es agonía.

Maltrechas las naves,
benignas las olas
superan tempestades
rojas y amargas
y sus vinagres
forman arco iris
en horizontes de alegría.