Balcón

Francisco S. González

HASTA la guapachosa Cuba fueron a rebotar cinco regidores priistas del municipio de Chilpancingo.
En primer lugar, el viaje obedeció a motivos de salud, informan. A curarse el estrés, mal que apañaron debido al cúmulo de problemas que les presentan de lunes a domingo los imprudentes ciudadanos.
No faltaron los rones, los bailes y las mulatas, aunque también hubo blancas ojiazules, de primera; pues sí, había que cumplirle al cuerpo, en esa estancia de ocho días.
Después del relax, ya centrado en asuntos de Estado, en audiencia privada a Fidel le plantearon los escozores del Congreso.
Todos en lucha por dos curules, inaudito chicos, replicó el campeón de la democracia caribeña. Nadie va. Acaso el viaje y las viejas no cuentan, además del altero de lana.
Curiosamente todos cancelaron la posibilidad de ir al Congreso en calidad de diputados locales.
Qué comprensivo y generoso es Fidel, aplaudieron los Cinco Fantásticos ediles en El Tropicana.

EL EXPERTO en ingeniería electoral -ciencia del manipuleo identificada como mapachería-, Jaime Ramírez fue echado hace meses del ayuntamiento, no por transa o torpe en su responsabilidad pública, sino por sus pretensiones políticas.
Sus carnales partidista, los regidores priistas, ante el alcalde Mario Moreno Arcos insistieron perrunamente en botar a González del hueso, porque “anda aprovechando el cargo para promoverse”.
Por la culata les salió el tiro. El ex funcionario municipal fundó una organización de colonos, con más de mil 500 afiliados, para las grillas y similares.
Y por si fuera poco se alió con Ricardo Moreno Arcos, en dupla que camina, Jaime al ayuntamiento, y Ricardo al Congreso.
Claro que Cuba tiene su lógica.
PERO no hay necesidad de atravesar el Atlántico para reventarse con la rueda de la fortuna un agasajo.
En Chilpancingo, por ejemplo, una síndica se sacó El Melate municipal.
Sin la molesta licitación pública de por medio, adquirió uniformes de policía por la bicoca suma de 900 mil pesos.
La ciudadanía no se incomoda por el infantil requisito de la licitación, sino por la compra de uniformes en lugar de bikinis y tangas, según se sabe
CON LA presentación del ex alcalde priista Edgardo Astudillo Morales en pasarela perredista rumbo al Congreso local, brota una roca en el zapato al presidente de Quechultenango, Napoleón Silva García, que también anda en esos trotes.
Napoleón ya visitó en tres ocasiones los municipios de Apango y Tixtla, ni se diga Mochitlán, en representación de la corriente Nueva Izquierda, que lidera Sebastián de la Rosa Peláez.
Pero el diablo se le atravesó.
Polo Guerrerense de Izquierda, de Armando Chavarría Barrera, enviará al compadre ex priista.
El pequeño problema que tendrá enfrente el empresario de Tixtla, será fatal para él. Eso de saludar y convivir con hombres y mujeres que son flagelados por el delito de la pobreza, de sol a sudor, como que no cuadran con su galanura.
Pero si la patria le exige más sacrificios, tendrá que aceptar de buena gana esa inmolación, que hoy le lleve a refrendar su calidad de mártir del ramo 33.
Independientemente si triunfa Nueva Izquierda o Polo Guerrerense, más claro que agua se vislumbra el triunfo del sol azteca en Tixtla, porque el PRI no cuaja.
No obstante, Izquierda Renovadora crece y se fortalece, y puede refrendar su permanencia en el ayuntamiento.
VARIOS alcaldes y diputados locales perredistas no irán a marchar el próximo domingo 1 de julio en la ciudad de México, con el Frente Amplio Progresista y su “presidente legítimo” AMLO, quien ese día se echará un rollo sobre lo que él considera el fraude electoral.
Importa el partido no el hombre, asestó un legislador, y menos el hombre que ninguneó al partido entronizando a un grupúsculo de priistas oportunistas y convenencieros, remató.
CERRÓ definitivamente sus cacerolas el restaurante Los Cedros, para dar alojo en esas instalaciones, previa remodelación, a la tienda Liverpool a partir de diciembre próximo.
Una muy buena lana, uno tras otro en efectivo, convenció a los propietarios del referido restaurante a deshacerse de ese precioso lugar.
ASEGURAN los que saben, que dos alcaldes incuban en la Secretaría de Finanzas del gobierno estatal.
Por Acapulco será Carlos Alvarez Reyes, y en Chilpancingo ganará Javier Ibáñez Reyes.
Y apuestan triple contra sencillo, esos que saben.
Ni Walton, ni César Flores Maldonado, ni el legislador Fermín y menos Salgado bachedonio, sostienen.