Balcón

Francisco S. González

DERROCHA carácter moral el médico Reyes Betancourt Linares al recalcar que él sigue militando en el PRI, pero que en uso de su privilegio de ciudadano libre, por el momento representará al PANAL en la contienda por el distrito 07 con cabecera en Chilpancingo.
"No soy de aquí, ni soy de allá", ilustra el cantar de Alberto Cortez la filosofía política del prestigiado médico, con pasos de ciego en su andar público.
¿Cree acaso que el PRI es una bacinilla que puede usar, botar y luego reusar? Porque con seguridad que sus "compañeros" del tricolor en su mayoría ya lo han de estar rehusando.
No obstante Reyes Betancourt puede hacer con su moral -"árbol que da moras"- lo que le pegue en gana, como agua fresca, miel o mermelada.
Mucha mermelada, en goce de su independencia, previa renuncia a su pertenencia priista. Porque pretender tener un pie aquí y otro allá, es incurrir, de entrada, en deslealtad con su nuevo partido, del que reniega desconociéndose en él identidad, ubicándose como la miel que al PANAL dará vigor estatal.

YA no sabe qué hacer, si echar maromas, contar chistes o reventarse las obras completas del Chapulìn Colorado -¿Y ahora quién podrá salvarme?- para que en el PRI le tengan confianza a Raúl García Leyva, síndico bajo el manto protector de los perredistas de Tlapa, a los que mandó hace un año a la goma cuando a la goma lo mandaron con la candidatura al Congreso local que pidió.
Optó por los cuentos infantiles para gente adulta.
Dos tiene de preferidos.
Uno narra que tiene a la "indiada" del distrito 27 local presta para servir al presidente de Acapulco.
El otro relata que esa misma raza de bronce es para la causa presidencial del jefe de Gobierno de la Ciudad de México.
Los dos contadas al módico precio de una diputación local, para representar a sus "hermanos indígenas".
Por lo pronto ya se olvidó de su jefe René Juárez Cisneros, el Geppetto de ese muñeco.

POR QUÉ razón el legislador José Calixto Díaz dejó ir a su cuadro Edgar Tapia Prudente al PRI, donde fue recibido por el candidato priista con la Coordinación con la Sociedad Civil.
Tapia Prudente descollaba hace un año como candidato del PANAL a la alcaldía de Tlapa, pero todo se derrumbó cuando el ex líder de la sección XIV se rebeló y se quiso poner a las patadas con doña Elba Esther.