domingo, 28 de febrero de 2010

La Roncha

Gustavo Salazar A

Mi buen cuate La roncha
anda muy sacado de onda
y cada vez más lampareado.
Su chava lo corta
por razones de Estado.

Seguro es por mi gran amor
al chupe, en su fango
es la excusa del atribulado.

La raza sin embargo,
con solidarios afanes hurga
en los atributos del gran cuate
y lo que descubre, la congela:
¡es cosa de tompeates¡

Esos pies cansados,
ese oscilar sin avanzar
que lo mueve como barco
anclado, fue el truene
con la ruca Cuca.

Y ella lanza fango:
Cuando el amor me hace
hace como que se mueve
con esa cadencia que me desespera,
él se arrulla y ronca y al amor
causa enojo,
y mejor recurro a un sismo, ansiosa
de la intensidad mayor.

La roncha, ya enterado
de sus proezas con trova
en los cafés narradas
por su ex domadora,
ni se inmuta:
Mira el cielo, su nariz escudriña
con mugre en la punta del dedo
y veinte minutos después escupe:
no hagan caso, es mala onda
la de esa, esa que fue mi… ruca.

No hay comentarios: