Balcón

Francisco S. González

LA VENTAJA en Tlapa es para la Corriente Renovadora, en los preliminares por la candidatura al ayuntamiento.
Dos jóvenes empresarios representan a ese grupo y a una buena parte de los electores de la llamada Capital de la Montaña.
Ángel Leyva, empresario de la construcción, desde hace rato en recorridos por comunidades y enlaces en colonias populares, gana terreno.
De codo nada duro, dadivoso, recolecta simpatías -quien sabe qué tan leales-, pero se le menciona como uno de los preferidos.
Tan es así que Polo Guerrerense de Izquierda le canta y adula ofreciéndole presidencia y diputación local luego.
Su par, Donato Pantaleón, competidor en el 2005 por ese cargo popular, se caracterizó por repartir efectivo y en especie cuanto le pidieron. Falto de estructura electoral, pagó el noviciado.
Pero hoy regresa con nuevos bríos y colmillo afilado, dispuesto a tejer las hebras del desarrollo político y social del municipio.
En la esquina de Polo Guerrerense de Izquierda (PGI), ilusiona el diputado federal Víctor Aguirre Alcalde, como carta fuerte.
El Congreso es su fortaleza, quizá también el escollo si le impiden solicitar licencia a ese cargo para soltar a otro. Aunque lo más seguro es que Aguirre Alcaide sea el candidato de PGI si la estrategia por el 2011 así obligue.
Se vería en esa contienda interna “de qué cueros salen más correas”.
Y si Polo carga con la responsabilidad de retener el ayuntamiento, nada difícil es conjeturar que la candidatura por la diputación federal del 2009 será para Nueva Izquierda.
¿Quién de ese grupo?
El alcalde Martín Benítez Flores o el diputado local Raymundo García Gutiérrez, están a la vista.
Escenario que se desdibujaría a ambos grupos si la Corriente Renovadora se alza con el triunfo del ayuntamiento, porque entonces irá por la curul federal, que aspirantes tienen muchos.
Esto suponiendo que el PRI, el PT y el PANAL estén atados de pies y manos.
Pero así no es y los sustos pueden culminar en infartos.
EL ENOJO central del presidente Calderón radica en que después de seis meses de gobierno, varios secretarios de Estado pasaron del “no está funcionando” al “no sirven para el cargo”. En las evaluaciones regulares sobre el gabinete realizadas en Los Pinos se venían perfilando las áreas en las cuales las cosas definitivamente no están saliendo. La peor evaluada en Los Pinos es Beatriz Zavala, secretaria de Desarrollo Social, sobre quien existe la peor opinión del gabinete. En segundo lugar estaba el secretario de Agricultura, Alberto Cárdenas, pero en los últimos meses corrigió su trabajo y salió del pozo. En su lugar entró Rodolfo Elizondo, el secretario de Turismo que, igual que Zavala, es el candidato más próximo a ser despedido, o que les solicite la renuncia. (Estrictamente personal. El Universal)
ENTRE el grupo de Los Chuchos, esa tribu del PRD que en las recientes escaramuzas intramuros del partido amarillo resultó gananciosa, sólo se ven caras alegres y declaraciones alentadoras. Pero cuidado, la presencia política de personajes como AMLO y Marcelo Ebrard no es menor y van más allá de los números. Ya aparecieron las voces que advierten que “del plato a la boca se cae la sopa”. Y es que arrinconar a AMLO es fortalecer la alianza del “legítimo” con Ebrard. Al tiempo. (Itinerario político. El Universal)
DESPUES de receso analítico sobre su desempeño y resultados como presidente del PRI de Tlapa, Willy Reyes Ramos, sostiene que el tricolor recobra espacios sociales y ni se dude la presidencia municipal, debido a la cohesión del priismo en la región de la Montaña, que se reflejará en el proceso electoral del año próximo.
EL EX alcalde de Coyuca de Catalán, Rafael Higueras, pretende escalar la dirigencia estatal de la CNC.
En Tierra Caliente Rafa Higueras tiene fama de ser muy creativo, sobre todo con las cuentas que rinde en sus cargos, porque como alcalde inventó obras y quedó como mentiroso y depredador del erario.
Quienes conocen a ese aspirante afirman que no irán con Rafa a esa aventura, pero sí le pueden aceptar una invitación al “Controvertidos”, en Coyuca, bar donde la grilla se ejerce con mayor pasión que en los procesos electorales.